De todo un poco

Antes que nada quiero contar que estoy en un trabajo temporal, por eso lo del post anterior, les explico envío correos a empresas luego confirmo si los han recibido y concerto citas, así que si vuelvo a escribir una conversación media rara es producto de las múltiples horas que paso hablando con gente sin rostro.
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Esto de hablar por teléfono con gente que en tu vida veras es medio raro, te das cuenta de que al fin y al cabo todo es bien falso y fingido, el tono de mi voz cambia y soy amable aun con aquellos que son mas pesados que una piedra.

Aprendes que en una empresa quien manda no es el gerente general sino la pinche recepcionista que pasa las llamadas a su antojo y te cuelga el teléfono si insistis demasiado, pido hablar con el Gerente de Informática y es ella quien decide que servicios de telecomunicaciones y seguridad virtual necesita la empresa, de que le sirvió tanto estudio de Ingeniería en Sistemas al pobre hombre si ella con solo oír mi voz ya sabe que no necesitan lo que yo les ofrezco.

Te das cuenta que los hombres lanzan piropos y se cuentean a las mujeres por pura inercia y diversión, porque aun si saber si soy la mujer más fea en la faz de la tierra, mas de alguno ha intentado hacerse el Don Juan conmigo, y sacarme una platica picarona que nada tiene que ver con el motivo de mi llamada.

Si hablo a las 12 en punto del medio día ya no hay nadie, tal parece que la gente sale corriendo de sus lugares de trabajo a la hora del almuerzo (lo mismo pasa con la hora de salida).

Y al final, las personas que trabajan en el 114 no son personas son Zombies con nombres comunes que han sido traidos desde el mas alla para brindar numeros de telefono de empresas que hace 20 años no existen, y no decir mas que las palabras que les han sido enseñadas ni una mas.

Bueno aquí termino me voy me espera una larga lista de personas a las cuales les tengo que hablar con voz suave y córtes chau!