miércoles, 14 de abril de 2010

Mi pecho en tu espalda


Me hace falta tener un libro para leer antes de soñar, contarte mis sueños al oído con mi pecho apoyado en tu espalda, con esos grandes latidos de corazón, de este corazón, que tanto te ama.

Me hace falta esa platica de madrugada, la amistad sincera y la caricia temprana, reír entre lágrimas y tener los zapatos mojados por la lluvia.

Me hace falta tu mano puesta ahí, justo al alcance de la mía, tu tiempo sin remordimiento y los secretos con testigos ciegos.

Me hace falta estudiar y yo al final sin poder evitar apuntar lo que tanta falta me hace.

1 comentario:

Luly dijo...

Tener a alguien cerca cuando tanto te hace falta es muy agradable.

Saludos